Fregola con marisco y azafrán

La fregola sarda es una especialidad de Sardegna, se trata de un tipo de pasta muy antigua que se elabora con tres simples ingredientes: sémola de trigo duro, agua y sal. La sémola de trigo duro se trabaja a mano frotando hasta obtener pequeñas esferas irregulares; el sabor es característico y se debe al secado y tostado natural de la pasta. Es adecuado para sopas y platos secos, y puede utilizarse de diversas maneras en recetas más o menos sencillas, con verduras, pescado o marisco.

320 g de Fregola sarda
300 g de almejas
300 g de mejillones
400 g de gambas
2 Calamares
300 ml de salsa de tomate cherry (Te recomendamos usar Concentrado de tomate Mutti )
1/2 vaso de vino blanco (Te recomendamos usar Alcamo DOC )
2 dientes de ajo
Chile no muy picante
Sal
Aceite de oliva extra virgen (Te recomendamos usar Aceite Extra Virgen de Oliva no Filtrado )
Perejil

Pon las almejas en agua fría durante al menos 2 horas para dejarlas escurrir, y luego enjuagarlas bien. Limpia los mejillones de algas y enjuagarlos bien.
Pon los mejillones y las almejas en una sartén, tapa y pon a fuego fuerte durante unos minutos para que se abran, luego colar la salsa resultante por un colador de malla muy fina. Saca los mejillones de sus conchas, dejando algunos para la decoración.
Limpia las gambas de sus cabezas y caparazones y retira la médula negra con la ayuda de un palillo, luego enjuaga bien. Retira la piel y las tripas de los calamares, enjuaga bien y córtalos en anillos finos.
Aplasta los dientes de ajo con el lado de la hoja de un cuchillo y dorarlo en una sartén grande con un poco de aceite, luego añade los calamares y deja que tomen sabor.
Añade las gambas y vierte el vino blanco.
Añade la salsa de tomates cherry y la salsa de marisco y cocina durante unos 15 minutos, salpimentando, luego añade el marisco y apaga el fuego. Filtra la mezcla para separar el pescado de la salsa.
En una olla grande, calienta un poco de aceite y añade la fregola. Se tuesta durante unos minutos y se añade un cucharón de la salsa y se deja que se absorba.
Procede a la cocción como si se tratara de un risotto, añadiendo salsa siempre que la pasta lo requiera. Cuando se termine la salsa, se añaden unos cucharones de agua (no se añade sal porque la salsa del marisco ya es muy sabrosa).
Cuando la fregola esté casi cocida, añade el marisco y termina la cocción. Añade un chorrito de aceite crudo, mezcla y apaga el fuego. Deja reposar en la olla durante un par de minutos.
Sirve con los mariscos en sus conchas y un puñado de perejil finamente picado. Buon appetito!

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