Leyendas de Calabria

Calabria es una región llena de historias y leyendas que se transmiten de generación en generación. 

Hay numerosos lugares misteriosos que abundan en la zona.

Cosenza: el tesoro de Alaric

Cuenta la leyenda que un tesoro de valor incalculable está enterrado en el lecho del río Busento, junto con los restos del rey de los godos. Cientos de esclavos fueron empleados para esconder este tesoro, quienes luego de desviar el río y traerlo de regreso a su cauce natural fueron asesinados, para no poder revelar el lugar del rico sepulcro. Esta leyenda siempre ha inspirado a poetas y escritores, despertando la curiosidad de muchos.

Los elefantes de Pirro en Campana

Dos grandes monumentos de piedra que recuerdan los rasgos de dos elefantes. Según la leyenda, estas dos esculturas son obra de los mahouts indios, que llegaron junto a Pirro en el 280 a. C. y que querían crear una especie de templo dedicado a los paquidermos. Según otras fuentes, los monolitos son obra de la erosión atmosférica y por casualidad adquirieron características particulares.

Las bocas del infierno en Cessaniti

En las afueras de Cessaniti hay una zona conocida por los lugareños como “vucchi du ‘mpernu”. En este misterioso lugar hay agujeros muy profundos de los que salen fuertes corrientes de aire. Según la leyenda, el diablo vive abajo y las corrientes son su aliento. Según otra leyenda, viven allí pequeños duendes vestidos de rojo, muy traviesos. Una tercera leyenda cuenta que Lamia, un monstruo femenino que se alimenta de sangre humana, se esconde en este lugar. Se dice que estas bocas una vez se tragaron todo el centro habitado.

El espíritu de Papietro en Albidona

Se dice que el espíritu de Papietro está presente en una antigua masía de Albidona. La finca se mantiene en pie a pesar de los terremotos, deslizamientos de tierra y el paso del tiempo. La finca era propiedad de un hombre que la dividió entre dos géneros, uno de los cuales estaba en el negocio del Diablo. Cuando los dos hombres se pelearon, el maligno comenzó a acechar a su rival, provocando ruidos molestos y animales de todo tipo circulando.

Fuente e imagen cortesía de Scopri la Calabria

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